La Sierra Gorda no para de sorprendernos con sus paisajes, su cielo o su mar de niebla; sin embargo, si volteamos hacia abajo también encontraremos vistas asombrosas en los adentros de la Tierra.
La naturaleza es majestuosa y sus abismos son una muestra de ello.
Cañón del paraíso

A 3 kilómetros de Peñamiller se encuentra un lugar impactante con paredes de mármol negro de más de 100 metros de altura; ideal para practicar rapel o montañismo.
En sus muros podrás observar petroglifos y pinturas rupestres hechas por los antiguos habitantes chichimecas. Además, por el Cañón del paraíso pasa el Río Extoraz.
El Infiernillo

Un cañón con longitud de alrededor de 1 kilómetro que poco a poco se va haciendo más angosto, lo cual lo va haciendo más imponente a la vista con sus 100 metros de altura.
Se encuentra escondido en Pinal de Amoles y tiene como sorpresa adicional la caída de una cascada.
Sótano del Barro

Es una profunda formación rocosa de 500 metros de diámetro y 450 metros de caída libre, es considerada una de las simas más grandes (profundas) del mundo, y se encuentra en el municipio de Arroyo Seco.
Otra de las maravillas de este lugar, es su fauna, pues es hogar de la guacamaya verde; al amanecer puedes ser testigo de las parvadas saliendo de la fosa.